Amiga mía:
Tu vida es ahora. Te digo esto desde el fondo de mi corazón. No es lo
que hiciste ayer. No es lo que harás mañana o en el futuro. Es ahora.
Hoy es tu oportunidad para vivir la vida real. Hoy es tu momento para
salir del pantano de tu satus quo.
Necesitas ser diferente en tus objetivos:
Por favor
-No te sientes en algún cómodo lugar de tu casa a ver televisión.
-No vendas tu alma por un paquete de grandes beneficios.
-No compres cosas para dar una imagen falsa.
-No pierdas el tiempo con personas que tienen propósitos mediocres en
sus vidas.
-No persigas el dinero y la trivialidad material.
-No permitas que lo que hace la mayoría te configure.
Tú eres una persona maravillosamente espiritual; se denota en tus más
auténticas ambiciones y en tus sueños. Sin embargo, no estás tomando tu
potencial en serio.
Estás comercializando invaluables días por meros "buenos ratos" y
"pasándola". Y eso es porque permites que tus temores te arrebaten lo mejor
de ti. Temes que el momento no sea éste, que los recursos no los tengas
ahí, que no poseas lo que se requiere. Y ahora, tu temor te debilita y
te hace caer por la borda arrastrándote hasta el fondo.
El único temor que necesitas es el temor de que continúes con una vida
mucho más pequeña que tu espíritu, para que despiertes algún día y te
encuentres como una persona encapsulada, como un mero producto de
cientos de pequeñas y mediocres elecciones.
O, peor aún, podrías morir inesperadamente el día de mañana, la próxima
semana o el próximo mes con tu música sonando todavía en tu interior.
La vida es ahora. Tu vida es ahora o nunca.
No puedes elegir el dinero por sobre tus verdaderos sueños sin una
consecuencia negativa para tu espíritu.
No puedes seguir permitiendo poner en pausa tus verdaderos talentos a
menos que quieras terminar sin ellos.
No puedes seguir haciendo a un lado tu "gran paso" sin que, poco a
poco, mates tu deseo de dar ese gran paso.
No puedes seguir intercambiando tu verdadero poder por el confort, sin
que algún día termines como un ser débil.
Tú posees una insondable fuerza y habilidad, pero rara vez haces uso de
tus tremendas fuerzas mental y física. Estas demandan expansión, ser
ejercitadas y puestas a prueba. Demandan ser usadas a su máxima
capacidad. Estas te recompensarán prometiéndote nada menos que grandiosidad y
excelencia.
Permíteme ser contundente, con la esperanza de decirte una verdad
concreta: Cada día que no te comprometes con la grandiosidad, te estás
durmiendo, permitiéndote sofocarte en un ambiente de mediocridad.
¿Será real esta atmósfera a la que hago alusión y que mata el espíritu?
Sólo necesitas echarle un vistazo al periódico o a la televisión para
saber que estamos rodeados por negatividad a la que poco le importa lo
relacionado con la inspiración de la grandiosidad humana.
Si eliges vivir en una atmósfera de mediocridad, nunca estarás tan
lejos de personas a las que poco les importa ser diferentes, que poco hacen
por mejorar, o con metas más altas.
Y estarás expuesto a un torrente continuo de productos, servicios y
esfuerzos donde el promedio generará tu rango. Si, en efecto, vives en una
atmósfera de mediocridad, si no despiertas y haces algo al respecto,
como un gas venenoso hará tu vida monótona, te aburrirá, te desilusionará
y te hará menos.
Amigo mío, tu vida es ahora. Alza con tu vida un estandarte en contra
de la mediocridad. Haz que tu grandiosidad no sea negociable. Ponla en
un lugar mucho más alto.
PD: no te dejes llevar...
Soledad..